
Cuando los rayos de sol nos animan a salir, cuando llevas calor en el cuerpo abrigado y frio en rostro y manos, sabemos que el invierno no ha acabado, pero se eleva el animo y todo lo vemos con mejor color.
En estos dias han subido las temperaturas y aprovechando que el sol nos da la luz y el calor necesarios saco la camara a la minima oportunidad y, a veces, solo a veces, consigo obtener una imagen que cuente lo que ven mis ojos y mi espiritu.