Lluvia de estrellas

La noche del  8 de octubre tuvo lugar un hecho poco habitual en el cielo. Se trata de una “lluvia de estrellas”, las Dracónidas, que reciben su nombre de la constelación El Dragón, son rastros de polvo (meteoroides) generados por el cometa 21P/Giacobini-Zinner El cometa 21P/Giacobini-Zinner es el causante de estos meteoros. En su paso alrededor del Sol desprende pequeños fragmentos de polvo, llamados meteoroides, que son atraídos por nuestro planeta cuando se cruza con esta órbita. Cuando estos residuos penetran en la atmósfera terrestre, se calientan y se pulverizan formando el fenómeno visual conocido como estrella fugaz o meteoro. Desde nuestra perspectiva parecen radiar de la constelación del Dragón  situada entre la Osa Mayor y la Osa Menor, al norte de la bóveda celeste.

En realidad, lo que parece en la foto estrellas en movimiento, es el trazo que queda en el sensor de la camara por usar una larga exposicion, mas de ocho minutos esperando a captar una de las estrellas fugaces que surcaron el cielo ese dia ante nuestros ojos, en la casi hora y media que estuvimos en nuestro puesto de observacion apenas vimos algo mas de una docena de pequeños rastros de meteoritos en el cielo, y desde luego no llegamos a captar ninguno con nuestras camaras.